21 nov 2007

Curiosidades Bíblicas

  • El libro de Esther no menciona en ninguna parte la palabra "Dios" literalmente. Además en este libro se encuentra el versículo más grande de toda la Biblia: Esther 8.9.
  • Según estudios, algunos dicen que el libro de Isaías es la Biblia en miniatura, veamos:Isaías tiene 66 capítulos, la Biblia 66 libros. El 1er capítulo de Isaías comienza como Génesis; la desobediencia y el pecado del hombre.
  • El capítulo 40 de Isaías profetiza sobre Juan el bautista, y el libro No. 40 de la Biblia es Mateo el cual habla de Juan el Bautista. El último capítulo de Isaías termina en el verso 22. dice: "Como los cielos nuevos y la nueva tierra" al igual que Apocalipsis y el ultimo verso de Isaías termina sobre la condenación del hombre impío, como Apocalipsis lo dice también.
  • Muchos predicadores dicen que los muros de Jericó cayeron por las siete vueltas que le dieron a Jericó, pero no aclaran que no fueron siete vueltas solamente, sino trece, una cada día y el último día dieron siete (Josué 6:15).

Jesús nos liberta

El Espíritu del Señor está sobre mí, me ha enviado para proclamar libertad a los cautivos” (Lucas 4.18)

Cuando se ha visitado una prisión, se siente una extraña sensación en el cuerpo cuando una pesada puerta de acero se cierra con un golpe; sabemos que millares de personas pasan años en cárceles; los que viven detrás de esos muros querrían ser libertados.

En el pasaje de Lucas 4, Jesús habla acerca de la libertad a los cautivos; cuando Jesús empezó su ministerio en Nazaret su ciudad natal, declaró “hoy se ha cumplido esta escritura delante de vosotros”; mucha gente que no ha estado encarcelada, vive detrás de “barras espirituales”; Jesús quiere liberar a esos cautivos por el poder de la cruz y mediante su resurrección, él puede hacerlo, todos pueden ser libertados.

Podemos ser liberados de la preocupación, ésta es una presión que reclama muchas víctimas, la preocupación se asienta como una nube oscura y cuantas personas viven en ésta situación; nos preocupamos por nuestros hijos, por nuestros empleos, por el coste de la vida, de esta forma va creciendo nuestra inquietud; Jesús dijo en Lucas 12, ¿quién de vosotros podrá con afanarse, añadir un codo a su estatura?, cierto es, por afanarnos no podemos crecer, ni siquiera vivimos más tiempo por preocuparnos, de modo que Jesús quiere librarnos de éste hábito que destruye la vida.

Podemos ser librados de la depresión, algunos viven vidas solitarias, la alegría desaparece de su rostro, porque son esclavos de la depresión, el rechazo atrae a la depresión, cuando el propio Jesús empezó su ministerio, su pueblo empleó hacia él, su rechazo, Lucas 4:28-30, de modo que muchos sienten el “aguijón” del rechazo, pero Dios nos acepta como somos, porque él nos ama y quiere lo mejor para nosotros.

Una de las razones importantes de la depresión, es el agotamiento que a veces se va produciendo en nuestras vidas, de manera que el Señor, hace una nueva invitación a todos los cansados “Venid a Mí, todos los que estéis cansados y trabajados, que yo, os haré descansar”, sólo en él encontramos paz, seguridad, confianza, bienestar; una de las razones fundamentales es refrescarnos de su Palabra, Dios nos habla a través de la misma, de esta forma mantendremos alejados la fealdad de la depresión.

También podemos ser liberados del enojo, por cosas que no tienen importancia, nos enojamos y es entonces fácil explotar por la presión del momento, en Efesios 4:26, nos dice: “enojaos pero no pequéis, no se ponga el sol sobre vuestro enojo, ni deis lugar al diablo”, es necesario controlar nuestro enojo, pues éste reposa en el seno de los necios, nuestro enojo puede ser desviado hacia el bien, el estar junto a Jesús nos libra de tal pecado, pues así y no de otra manera debemos imitarlo en todas aquellas experiencias que tengamos en nuestras vidas.

María Segalés

Una fotografia de mi iglesia

Aunque mi Iglesia es pequeña es grande en amor, los fieles al Señor van llegando, otros hermanos esperando con anhelo que Jesús escuche la oración.
Un hermano en su mirada tiene un pedazo de cielo y entre sus manos reposa su oscurecido bastón, sus ojos humedecidos por lágrimas de emociones desbordantes por que lleva a Dios en su corazón.
Se oye una voz melodiosa que invade toda la estancia como una suave fragancia que eleva a nuestro Dios, es el coro de hermanas que con amor siguen cantando; el lugar se va llenando de devoción que unida con la oración nos llenan de dulce paz.
Muy cerca algunos chiquillos rebosantes de alegría llenan de algarabía por instantes la oración, después un gran silencio ha llegado el momento de abrir la palabra del Señor que traspasa los huesos y llega hasta el corazón.
La presencia del Señor se siente en todo lugar y hasta podemos palpar su gracia y su bendición y al despedirnos los hermanos unidos como con lazos de Dios sentimos la abundancia del amor de Dios.

La Biblia es La Palabra de Dios

Cuando el renombrado escritor escocés Walter Scott se vio postrado en su lecho, abatido por la enfermedad, le dijo un día a su yerno: "Tráeme el Libro." Pero como Scott tenía veinte mil volúmenes en su biblioteca, el yerno le preguntó qué libro era el que quería; a lo que el famoso escritor contestó: "No hay nada más que un libro: la Biblia." Walter Scott había escrito muchos libros; pero al llegar a los umbrales de la eternidad reconoció que solamente hay un libro que puede iluminar la mente, sustentar el alma y confortar el corazón.

16 oct 2007

Historia del himno "Sublime Gracia"

I. Sublime gracia del Señor que a un infeliz salvó; fui ciego, mas hoy miro yo, perdido y Él me halló. II. Su gracia me enseñó a temer; mis dudas ahuyentó; ¡oh, cuán precioso fue a mi ser cuando Él me transformó! III. En los peligros o aflicción que yo he tenido aquí, su gracia siempre me libró y me guiará feliz. IV. Y cuando en Sión por siglos mil brillando esté cual sol, yo cantaré por siempre allí su amor que me salvó.

Es un poema, un Himno litúrgico, una canción muy conocida en el ámbito del cristianismo, entonada en casi todas las denominaciones cristianas.

Este himno ha sido muy popular en la comunidad cristiana mundial, porque refleja la Doctrina de la Gracia divina que Dios demuestra hacia los hombres, basada en 1ª Crónicas 17:16 cuando el rey David se maravilla de que Dios le haya escogido a él y su casa, para gobernar sobre Israel.

John Newton nació en Londres el año 1725. Su padre fue un capitán. Su madre, una devota mujer que dándose cuenta que la enfermedad que la aquejaba pronto iba a acabar con su vida, enseñó a su hijo a conocer la Biblia a muy temprana edad.

Cuando John tenía 7 años, su madre murió y él se convirtió en un niño del camarote de un barco pesquero. Sus experiencias a través de los años en el mar fueron peligrosas y emocionantes, una vez fue embriagado y llevado como parte de tripulación a la fuerza de un Barco de Guerra.

Allí fue cruelmente tratado siendo golpeado y abusado. Luego de esta experiencia se enroló en un barco de esclavos y con el tiempo llegó a ser el capitán. Durante todo este tiempo John vagó lejos del Dios de su madre y de la Biblia. Más tarde escribió "Con frecuencia vi la necesidad de ser un cristiano sólo para escapar del infierno, pero amaba el pecado y no estaba dispuesto a abandonarlo".

Cada año caía más bajo en las garras del pecado y pronto estaba en tal estado que la tripulación lo despreciaba, considerándolo sólo un animal.

En una ocasión, el borracho capitán cayó por la borda pero sus hombres no hicieron mucho esfuerzo para rescatarlo. Simplemente tiraron un arpón que se clavó en su cadera y tiraron de la cuerda. Fue levantado como si hubiera sido un pez grande.

Debido a este suceso, John Newton cojeó por el resto de su vida, pero como él diría. "Cada paso es un constante recuerdo de la Gracia de Dios sobre este desventurado pecador".

Sublime Gracia (Amazing Grace) es en realidad la historia y testimonio de la vida de John Newton. Fue en 1779, mientras trabajaba en otro himno con William Cowper, autor de "Esta es una fuente llena con Sangre" que él escribió esta gema de himnología usando como su título "Fe, revisión y expectación".-

John Newton, el fiel cristiano anglicano y autor de una de las melodías evangélicas más bellas de la historia descansó con el Señor el 21 de Diciembre de 1807.

Directamente de Dios a su corazón

Una de las primeras frases que me enseñó mi madre cuando era niño fue: Me llamo Jesús Dionisio Sánchez, para servirle a Dios y a usted; recuerdo mucho lo que me ruborizaba decirla, pero era mayor la satisfacción de ver la sonrisa de mi madre, satisfecha, por lo bien educado que estaba su niño.

Vengo de una familia de doce hermanos, seis chicos y seis chicas; en casa se han pasado muchas dificultades, desde los problemas con las drogas, hasta la incapacidad mental de tres de mis hermanos, mencionando también el problema económico; pero mi madre llevaba en su corazón, el mayor de los tesoros que uno pueda tener “Cristo Jesús, nuestro Señor”.

Mientras los demás nos sumergíamos en la tristeza de nuestra situación, ella luchaba por servirnos y por servir a su Dios Jehová.

“Jehová es mi Pastor, nada me faltará, en prados de tiernos pastos me hace descansar” Salmo 23:1-2; era uno de sus salmos favoritos; la recuerdo en su mecedora haciendo punto, sumergida en el gozo de aquellos prados y sus charlas de cuan agradecidos debemos estar a Dios.

El pasado 20 de enero de 2007, Dios la llamó a su presencia, desde ese día noté, además de la ausencia de mi madre, la ausencia de un amor al prójimo muy grande. Asisto a la Iglesia Evangélica Bautista de Novelda, fui bautizado el 23 de septiembre de 2007 con la esperanza de recuperar el amor de Dios en nuestras vidas; me regocijo al pensar, que el mayor amor que recibió mi madre y sigue recibiendo, es directamente de Dios a su corazón, Jesús Dionisio Sánchez, para servirle a Dios y a usted”

1 oct 2007

Nuestra historia como iglesia...

La historia de las iglesias en el mundo, es como la "macro-historia" de un hombre o de una mujer que se ha entregado al Señor y han intentado vivir los principios que dimanan de las Escrituras.

Un día, unas personas descubrieron la Salvación a través de Cristo Jesús, muchas otras vivieron también ésta experiencia en otros lugares de nuestra geografía.

Al igual que un individuo que ha creído en el Señor pasa por momentos de euforia y de crisis; las iglesias bautistas pasarían por tiempos de avivamiento, y por tiempo de estancamiento, es solo a través de estos estados, cuando se produce la madurez y la estabilidad necesarias para el perfecto funcionamiento; requisitos indispensables para poder hacer mella en un mundo que no estima a Dios.

Tal fue el caso de aquél Esteban; o de aquel Felipe que predicó el evangelio a un etiope para que más tarde llevara el evangelio a África. Nuestra historia como la de otras muchas iglesias que conocemos, son el producto de una iglesia como la que mandó a Bernabé a Antioquía para que conocieran al Señor; o Pablo, que compartió sus creencias y fe por todo el mundo.

En definitiva, la obra evangélica de la que formamos parte los bautistas de ésta ciudad de Novelda es la efervescencia de aquel Jesús que en la cruz comenzó una nueva historia, un nuevo reino compuesto por un “Pueblo” redimido que llama a más pueblo a la redención.

Por todo ello hemos querido escribir la historia que con todos estos hechos, dio cuerpo a lo que hoy es la obra evangélica bautista en la querida ciudad de Novelda.

La Obra empezó allá por los años 50, concretamente en el año 1952, es decir hace 50 años, una mujer llamada Ceferina Verdú Pastor, madre de un actual diácono de esta iglesia, entró en contacto con el entonces pastor D. José Bonifacio Andrés, que por esos tiempos también visitaba y predicaba en la localidad vecina de Aspe (a 5 km. de Novelda); ésta mujer solía desplazarse caminando hasta Aspe par escuchar los mensajes de D. José, pues le gustaba mucho oir la Palabra de Dios.

Un día, le propuso al pastor predicar también en Novelda, en su propia casa, asegurándole que invitaría a sus vecinas y amigas para que pudieran escuchar la Palabra de Dios. Hubieron por aquel entonces, muchos testimonios de fe en Jesús.

Tampoco queremos dejar en el olvido a tantos hermanos fieles que componen ésta congregación que en los momentos más difíciles por los que se pasaron con su fidelidad y lealtad apoyaron con gran esfuerzo tanto material como espiritual, a que el evangelio siguiese adelante a pesar de todo, estamos seguros de que sus nombres quedarán reflejados en el HABER, del testimonio.

A continuación de D. José Bonifacio, tomó las riendas de la obra, D. José Luis Barba Lafuente, también pastor de la iglesia de Elche, durante su pastorado fue cuando se adquirió una casa cedida por un hermano de la congregación, la cual fue acondicionada para celebrar cultos y reuniones, pasados unos años, el pastor Barba, tras enfermar, tuvo que dejar el ministerio del pastorado.

Por aquel entonces varios hermanos de ésta congregación y por causa de trabajo, tuvieron que emigrar a otros países y como consecuencia de ésta disminución de los miembros, la Obra en esta ciudad se estancó durante algunos años.

Poco después se hizo cargo de la Obra en Novelda, el pastor D. Luis Campillo, quien por circunstancias que no vienen al caso, no pudo continuar por mucho tiempo en Novelda.

Más tarde de forma esporádica se hace cargo de la Obra el que fue pastor (por después, jubilado) de la iglesia de Alicante, D. Luis Hombre, quien falleció pocos años después, nuevamente se quedaron sin predicador que atendiera éste punto de misión; de vez en cuando algunos hermanos diáconos de Elche, se desplazaban hasta Novelda para tener a su cargo la responsabilidad de las predicaciones, alternando con otros pastores invitados.

Fue entonces cuando la iglesia de Elche invitó al pastor misionero alemán Rainer Sörgel, quien aceptó la invitación; compartió la Palabra en ésta iglesia por espacio de siete años, al término de los cuales marchó de nuevo a Alemania para cursar los estudios necesarios para formarse como profesor de teología en un seminario español, con lo que nuevamente, la iglesia de Novelda volvía a quedarse sin pastor.

A continuación, es invitado a predicar y a hacerse cargo de la Obra, el hermano Juan Andrés Chacón Alfaro, hasta entonces miembro de la Iglesia de Alicante, y desde entonces y hasta el día de hoy, pastor de ésta iglesia; la Obra en este lugar es muy costosa ya que es una ciudad con muchas raíces católicas, aunque tan sólo sea de nombre.

En mayo de 2005, tuvo lugar una campaña de evangelismo en una plaza de ésta localidad, la cual trajo mucha bendición de parte del Señor y como resultado de la misma, hubo un avivamiento en la congregación y mucho ánimo de trabajar para el Señor.

El mes de octubre del 2006, el pastor Jorge Juan Pastor, se hace cargo como pastor interino de la iglesia de Elche (actualmente sin pastor), crea en él, mucho interés la marcha de la Obra en Novelda, por ser punto de misión de Elche, y acuerda que, al obrero que está haciéndose cargo del punto de misión, se le reconozca, con la autoridad que da la Palabra de Dios, apto para desempeñar firme y fielmente el ministerio de pastor de ésta congregación con plena dedicación; posteriormente, tras una asamblea en Novelda y más tarde en Elche fue aprobada ésta moción por unanimidad y sobre todo por voluntad de Dios.

El pastor Jorge nos comentó que, debido a la escasez de pastores y al problema de la cuestión económica de una iglesia pequeña como ésta, en la que no se puede tener un pastor a pleno tiempo, nos dijo que pondría el asunto en oración y que ya se buscaría una solución.

Como resultado de todo ello, y como ya se ha comentado antes, el día 8 de julio de éste mismo año, fue nombrado a Juan Andrés Chacón Alfaro, como pastor oficial de la iglesia de Novelda; el cual sea dicho de paso, también colabora como predicador en la iglesia de Elche.

El Señor tiene todavía mucho trabajo que hacer en ésta iglesia y en ésta ciudad; sobre todo, para que sepan que aquí hay un lugar donde se reúnen sus hijos y se proclama el Evangelio.

LA MEJOR NOTICIA QUE PODEMOS DAR

“Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su Hijo unigénito, para que todo aquel que en él cree, no se pierda, mas tenga vida eterna” Juan 3.16

Sin duda es el versículo más famoso de la Biblia porque encierra el mensaje del evangelio: el amor de Dios por toda la humanidad expresado en el sacrificio más grande de la historia. El amor de Dios no es contemplativo, es real, hizo por el hombre el sacrificio mayor porque es el amor mayor: la entrega de su único Hijo. Este versículo explica el amor de Dios en su máxima expresión.

Ahora, ¿se trata de una expresión de amor basada en un sacrificio personal de Dios solo para mostrarlo en lo que puede llegar a hacer por el hombre? ¿Se trata de un sacrificio hecho solo con fines demostrativos, es decir, para que todos sepamos hasta dónde es capaz de amarnos? ¡No!.

El texto dice que ese sacrificio de amor tiene un propósito bien específico: para que todo aquel que cree en Él no se pierda., El amor fue para todos; pero la vida eterna para los que creen. Sí, el amor de Dios en Cristo es una puerta abierta para todos, pero solo entran por ella los que creen en Él, entonces no se trata de seguir ésta o aquella religión, si no de poner la fe en alguien bien específico: Jesucristo, el Hijo de Dios.

Amigo que lees estas líneas, para no perdernos solo hay un camino, ese es Jesucristo, fue Él, y solo Él, el que pagó el precio por el pecado que nos condena delante del Padre.

Si tienes tu fe y esperanza puestas en otra cosa que no sea solamente en Cristo reflexiona, pues, este plan de amor de Dios basado en su amor, costó demasiado caro para que lo despreciemos.